KEY
Yo nunca he tenido animales domésticos en casa, pero no porque no me gusten, sino porque en los lugares donde hemos vivido solo nos hubiese faltado eso. Pero cuando estaba en Calafat tenía a mi "key", y lo disfrutaba intensamente. Era un perro rebelde, juguetón y alocado. Yo era la única persona que le podía detener en sus ataques de ansiedad. Como cuando perseguía a los ciclistas (en más de una ocasión lo tenía que despegar literalmente del pobre y acojonado indurain). Pero en el fondo era inofensivo. Aquí hago un homenaje a mi mascota...a la que hecho tanto de menos.
- ¡Key! ¿Nemí?!!
albert - 09:49